En muchas ocasiones oímos o leemos noticias sobre enfermedades que nos resultan extrañas o infrecuentes en nuestro entorno. Es el caso de la hepatitis A que tiene una incidencia notable.
La Hepatitis A es una inflamación del hígado producida por un virus. Se transmite principalmente a través de alimentos o bebidas contaminadas con materia fecal. Si bien suele ser una enfermedad leve, puede conducir a insuficiencia hepática aguda y muerte en individuos con sistemas inmunológicos comprometidos. Está claro que es un tema serio.
Los métodos principales para prevenir la infección por hepatitis A son el manejo higiénico de los alimentos y la vacunación. Por tanto, higiene del manipulador, seguridad para el consumidor.
El lavado adecuado de las manos previene la propagación de la hepatitis A y es especialmente importante después de usar el baño y antes de manipular alimentos y bebidas. Esto significa emplear jabón y agua corriente durante un mínimo de 20 segundos y tener cuidado de incluir el dorso de las manos, las muñecas, entre los dedos y debajo de las uñas.
Los bares, restaurantes y otros establecimientos de alimentos, al cumplir la ley empleando sólo a personal debidamente formado con el Curso de Manipulador de Alimentos, pueden ayudar mucho a prevenir brotes de enfermedades transmitidas por alimentos, como es la Hepatitis A.
Nuestro consejo es que no dejes que la hepatitis A y otras enfermedades similares te sorprendan. Para ello, tenemos tres claves, cada una dirigida a uno de los tres grupos implicados:
– Como empresario hostelero o dueño de una empresa alimentaria: recuerda que la imagen de tu marca comienza por la seguridad. No debes desatender la formación de tu equipo. Un descuido puede convertir tu negocio en tu pesadilla, además de poder hacer mucho daño a tus clientes.
– A los consumidores: sed conscientes de las buenas prácticas higiénicas y evitad los establecimientos hosteleros dudosos.
– Por último, como trabajador de la industria alimentaria o de la hostelería: asegúrate de que estás recibiendo la formación exigida para mantener a la población segura.